miércoles, 2 de julio de 2008

chocolate amargo

Quedarse callado puede ser tan dulce o tan amargo...

Nunca te dije cuanto te amaba, ni lo importante que eras en mi vida, será porque suponía que tu lo sabias, será porque temía decirlo en voz alta.

Hice de mi lengua un nudo y me bebí de a poco el amor, ese amor que ahora me causa veneno en la garganta, ¿para que sirve saberte mi mundo si nisiquiera tu lo sabes??? ¿Para que sirven mis letras si tus ojos están tan lejos??? ¿Para que sirve que te grite que te extraño? si mis labios están mudos y tus oídos secos de mi...


Pero aunque nunca hayas sido mio, ni vayas a serlo jamás, sigues aquí, te poseo en cada noche que la luna ilumina mi ventana, te fumo en cada cigarrillo de la tarde, te presiento en cada látido de mi corazón y te amo aunque no puedas verlo ... te amo.


Sigues aquí eterno, dulce, oscuro, tierno
Te espero